Mes: abril 2016

Margaret Bourke-White

ADIÓS MI AMOR

Se fue sin despedirse de mí, le cuento. Y claro, eso lo sentí mucho. No sé, tal vez yo le recordaba su vida de antes, la de los tiempos amargos de Arístides, que ella ya había enterrado para siempre. De modo que usted que ha venido aquí averiguando cómo es este vecindario y quién vivía donde piensa vivir, múdese tranquila, le digo.

1975

1975

Al principio eran dos. Me miraban tan campantes, como si tal cosa. Eran apuestos y, como una pareja de actores, se mantenían totalmente alerta. Recuerdo que iban vestidos de blanco y negro –aunque igual me equivoco en algún detalle–, uno con un chaleco y el otro con una camisa de abuelo.

ANJA

ANJA

No le gusta dejarme sola porque no confía en mí así que iré con él hoy, me lo ha prometido, a veces quiere y otras no, es según cómo me porte, zas. Si mancho su uniforme o hago una desas cosas raras que me gusta hacer me encierra nel cuarto y se lleva la llave hasta que llega la noche.