Me dio la plata. Teme perder sus mapas, las fotos, las cartas; me contrató para que le ordenara su archivo, me paga un sueldo, etc., aprendí de él a decir etcétera cuando quiero cambiar de tema, pero él lo pronuncia más taxativamente en italiano: echétera, dice, y hace un gesto con la mano como diciendo no pienso seguir con eso. En realidad me paga la carrera.